Técnica del Jardín de la Abuela

Buenisimos días soletes!

Siguiendo con los últimos posts de mi blog sobre técnicas de patchwork, hoy he querido traeros uno sobre una de las técnicas más sencillas y bonitas que existen, fundamental para todas las amantes de la costura: El Jardín de la Abuela (Grandmother’s Flower Garden Quilt).

Se piensa que surgió a principios del siglo XIX en Inglaterra, y a partir de ahí fue expandiéndose por todo el mundo y consolidándose como una valiosa técnica de de paper piecing (¿Qué es el paper piecing? Descúbrelo)

¿Te animas a conocer un poco más sobre el Jardín de la Abuela? ¡Vamos allá!

Un poco de historia sobre la técnica del Jardín de la Abuela

Esta conocida técnica tiene orígenes muy antiguos. Los primeros hallazgos de su aplicación se remontan a la Inglaterra del año 1770, época de la que data el primer patrón hexagonal encontrado hasta la fecha. Desde entonces y hasta 1830, la técnica fue creciendo en popularidad, pasando desde Inglaterra hasta América y esparciéndose por el mundo.

Aproximadamente en 1830, se acuña por primera vez el término Jardín de la Abuela. Este nombre se le da al patrón resultante de la aplicación de hexágonos en un quilt con telas combinadas cuidadosamente para crear la figura de flores. Fue muy utilizada durante este periodo, pues permitía reutilizar trozos de tela muy pequeños sobrantes de otras creaciones y fundamentalmente, de aquella ropa que se quedaba pequeña o se estropeaba, recortando los trozos inservibles y reaprovechando el resto.

Su aceptación fue tal, que la revista femenina Godey publicó en 1835 un patrón de este bloque, convirtiéndose así en el primer patrón para quilt publicado en América.

Al pasar los años, debido al creciente interés en el mundo de la costura por el patchwork y el english paper piecing, por su facilidad, y por los excelentes resultados, El Jardín de la Abuela se hizo más y más popular, produciéndose cambios en su diseño, sus colores y las formas empleadas en su aplicación, que dieron lugar a un sinfín de posibilidades (únicas como cada una de nosotras 😉 )

Te enseño varios ejemplos que he visto por internet para tu inspiración:

¿Cómo se realiza la técnica del Jardín de la Abuela? Consejos

Uno de los aspectos más engorrosos a la hora de utilizar esta técnica es calcular la cantidad de trozos hexágonos y trozos de tela para un determinado trabajo.

Te pongo un ejemplo:

Si quisieras hacer un bloque de 10 pulgadas (alrededor de 25’4cm), deberías realizar los siguientes hexágono (ATENCIÓN: la medida que se usa de referencia siempre es la del lado que va a ir unido a otra figura, sea igual o sea distinta):

• Si las piezas de hexágono son de 1/2” (1,27 cm), tendrás que hacer 208 hexágonos.
• Si son de 3/4” (1,90 cm), serán 92 hexágonos.
• Si son de 1” (2,54 cm), requerirás 52 piezas.
• Y, por último, si son de 1,5” (3,81 cm) vas a necesitar 23.

Para llevar a cabo las piezas, una vez que sabes qué tamaño vas a usar, debes elegir qué técnica de patchwork usar. Ya que aunque tradicionalmente se asocia el jardín de la abuela a EPP, también puedes coser las piezas a punto de encuentro (ver tutorial de costura a punto de encuentro). En la costura a punto de encuentro es necesario usar una regla o plantilla que nos permita sacar la línea por donde debemos coser. Además, esa regla o plantilla nos servirá para hacer juegos de caleidoscopio (ver tutorial de efecto caleidoscopio).

Además, como el margen de costura es siempre el mismo, la costura a punto de encuentro es muy muy fácil y precisa y por si puera poco, la regla nos servirá para aprovechar mejor esos restos de tela que que nos han quedado de otras labores, porque al llevar el margen de costura no hay lugar a error y puedes descartar fácilmente las piezas demasiado pequeñas ahorrando mucho tiempo, trabajo y también dinero (que podremos usar para poder seguir comprando telas jejeje) Puedes optar por comprar una regla de hexágono o comprar un kit de piezas de hexágono (en el caso de mi tienda, debes saber que todas mis piezas se pueden reutilizar varias veces) si quisieras hacerlo con la técnica de EPP (Ver tutorial) en cuyo caso, verás que las reglas nos facilitan mucho el trabajo, porque además de conseguir los efectos de caleidoscopio que te comentaba antes, verás que el forrado te queda perfecto porque tiene el margen necesario justo para que trabajes con comodidad y sin equivocos.

Dependiendo de tu creatividad, es posible combinar cada bloque con forma de flor con formas geométricas diferentes a los hexágonos. Esto depende completamente de tus gustos particulares pero te animo a experimentar porque los resultados son increíbles.

Por ejemplo, es posible combinar los hexágonos con diamantes, dando lugar a patrones diferentes que hagan de cada pieza, única. Al final, ¡el límite lo ponemos nosotras!.

Cada persona tiene su propia forma de planificación antes de empezar a divertirse con sus telas de patchwork favoritas. Una recomendación personal es que intentes dibujar tus diseños antes de empezar con ellos, ya sea a mano o con ordenador. Imprime el resultado para que te ayude de guía durante todo el proceso, así evitarás posibles errores con las figuras o las telas.

Y por supuesto… ¡no te desanimes si a la primera te cuesta y no te sale como esperabas! Como un bebé, antes de correr, primero tiene que caminar. Se trata de un proceso que requiere un tiempo, pero que definitivamente aporta mucha diversión, relajación y paz interior y si nuestras antecesoras, allá por el 1800 hacían unas colchas así de estupendas, imagínate los resultados que obtendremos nosotras con materiales de última generación?? pensados y diseñados exclusivamente para ésto, te lo imaginas? Pues si no te lo imaginas, te invito a que lo hagas y si no los conoces aún, estaré encantada de enviarte una muestra para que lo compruebes tú misma. Envíame un email a hola@juanicavas.com con todos tus datos para que te la envíe a casa 😉

Besicos de colores, y feliz día soletes!

Galería de EJEMPLOS de la técnica Jardín de la Abuela